Como cada mes de diciembre, este año lo despedimos en la ermita de San Cosme y San Damián, en el barrio de Illeta, Galdames. Se ubica a escasos metros de la pista que, desde la carretera de Umaran (BI-630) asciende por Amabizkar Goikoa hacia el Eretza, Saratxo, etc.
Las primeras referencias históricas escritas de esta ermita datan de 1767.
¿Quiénes eran estos dos personajes a los que Illeta hace culto? Dos gemelos de cinco hermanos nacidos en Arabia en el S. III d. C. que siendo muy pequeños quedaron huérfanos de padre. Su madre, muy creyente en la fe cristiana les educó en el cristianismo. Estudiaron medicina en Siria, ejerciendo en el puerto de Ayash (Ajass), mar Egeo, en el Golfo de Iskenderun en Cilicia, Asia Menor. Es ahí donde aplican sus conocimientos, tanto a personas como a animales.
Cuando la medicina no hacía el efecto deseado, la devoción y la fe en Dios hacía el resto. Esto suponía que muchas personas acudieran a curarse, cristianas o no. Tampoco cobraban por los servicios prestados.
Vivieron en tiempos del emperador Diocleciano (284-305) uno de los mayores perseguidores del cristianismo. El gobernador Lisias, bajo órdenes precisas de Diocleciano tenía que neutralizar a todos los cristianos y estos no fueron menos. El gobernador les ofreció la opción de renegar o morir. No estando dispuestos a renegar de su fe, fueron sometidos a toda clase de torturas, hasta ser decapitados un 27 de septiembre, probablemente en el año 287. Fueron enterrados en Cirus, Siria.
Después de muertos, cuenta la tradición, Cosme y Damián siguieron apareciéndose en sueños a mucha gente. Particularmente a los enfermos que imploraban su mediación. Estos obtenían alivio en el dolor o la anhelada curación.
Patronos de medicina y farmacia. Hoy, muchos fieles siguen recurriendo a la intercesión de los médicos mártires. Se hace para pedir la curación de alguna enfermedad que se padece, o la de un familiar o amigo.
A lo largo del tiempo se les ha dedicado muchas iglesias y ermitas en el mundo, como esta de Illeta. La festividad es el 27 de septiembre.
Partimos desde la Plaza San Severino y por la BI-630 hasta el alto de la Herbosa, nos metemos a Beci y por la pista de la izquierda hacia el collado Longuitas-Billar. Descenso largo 4.2 km/366 m- bordeando el monte Billar 513 m hasta el barrio de Carral en Sopuerta. Rotonda por la izquierda y a 500 m seguimos la indicación de “ÁREAS RECREATIVAS”, pasamos la ermita de San Roque y ascendemos por el pinar a la carretera de Arce.
La seguimos por la derecha ascendiendo a los barrios de Arce, Concejuelo (Torre Loizaga), Allende y Larrea. Salimos a la carretera de Umaran (BI-3631) y subimos 800 m hasta un camino que baja a la izquierda para empalmar con la otra carretera de Umaran (BI-632). Bajamos al barrio de Txabarri y ascendemos el cordal montañero que, desde el barrio Garay en San Pedro de Galdames asciende hasta el barrio de Illeta 2.8 km/171 m+. Descendemos por pista de hormigón al siguiente desvío, que seguimos de frente ascendiendo hasta la ermita 800 m. Enseguida la vemos a la izquierda.
Escenario muy apropiado para un hamaiketako y si el buen tiempo acompaña, charlar un buen rato. Descendemos a Güeñes, por Aranguren a Zalla y Balmaseda.
Distancia: 40.4 km
Desnivel +: 1.016 m
Desnivel -: 1.015 m
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